Los cerrajeros son profesionales de la metalurgia, especializado en la fabricación, modificación, reparación y todo lo relacionado con llaves, candados, cerraduras, cerrojos y trabas de seguridad para puertas, tanto de inmuebles como de vehículos.
Para que el cerrajero pueda cumplir con su trabajo, requiere de un grupo de herramientas y de la habilidad para manipularlas, de manera que consiga resolver el problema y no cause daños a la puerta, candado, cilindro o cerradura a manipular.
Las herramientas más comunes en la cerrajería son:
- La ganzúa, la cual es una especie de gancho metálico que se utiliza para manipular una cerradura y conseguir abrirla sin necesidad de la llave. ¿Cómo se usa? Se introduce en la ranura de la cerradura y, como está hecha de metal, puede movilizar los pasadores del cilindro sin doblarse, logrando que se posicionen exactamente como lo haría la llave y se abra la cerradura.
- La máquina duplicadora de llaves, por su parte, es un artilugio electromecánico conformado por engranajes, esmeriles pequeños y limas giratorias que fabrican los propios cerrajeros para duplicar llaves, y consiste en un mecanismo que, guiado por la forma de una llave original, talla en el metal para conseguir otra con configuración idéntica.
- Lima de metal, martillo y juegos de destornillador o desarmador.
- Pinzas de presión, mecánicas, de chófer o de punta remachadora, son herramientas de uso común en la metalurgia.
- El taladro y taladro inalámbrico, el cual se usa para perforar el metal, donde sea necesario, con sus brocas de diferentes medidas.
- Broca sierra, la cual se utiliza para cortar generalmente en formas circulares.
- Escofina, la cual es una especie de lima estriada de metal.
- Formón, que es una especie de pala plana metálica delgada para hacer calado en orillas de madera.
- Machuelos, que son como tornillos que se instalan en el taladro, o en una máquina giratoria, para perforar materiales creando rosca en los orificios.
- Juegos de llaves, entre ellas: estriadas, españolas de diferentes medidas y el autocle o rache, que es un juego de dados de diferentes medidas para mover tuercas y tornillos.