Sin lugar a dudas son temas muy destacables, ya que de ellos es dependiente la sustentación del edificio, pero no debemos olvidar que el edificio es un grupo de varios elementos y que entonces todos influyen en el momento de que el mismo aporte las condiciones primordiales.
Uno de los elementos que creo muy destacables son los revestimientos de fachada, ya que es la piel que va a proteger al resto de los elementos de las condiciones climáticas.
Muchas son las tipologías de revestimientos que tenemos la posibilidad de usar, pero posiblemente el más usados en la rehabilitación de fachadas son los Revestimientos con Morteros Monocapa, dado que aportan enorme conjunto de atrayentes propiedades y además son subjetivamente baratos, algo que se tuvo muy presente en los tiempos recientes.
Los Morteros Monocapa aúnan la colocación de un enfoscado exterior con la aplicación de color a dicho enfoscado, por lo cual economizan en esta cubierta las pretensiones de revestimientos exteriores de fachadas.
Además, la fachada monocapa contribuye cierto nivel de impermeabilización, aunque es imposible tener en cuenta una cubierta impermeabilizante en sí misma, ya que en caso de lluvias muy continuadas termina por ceder frente el paso del agua. Es un material que estimula el secado por evaporación entre dos lluvias consecutivas, por lo cual entre ellas es requisito un preciso tiempo para que dé tiempo al secado. Es visible que si los espesores del revestimiento monocapa no alcanzan, este efecto de impermeabilización no se consigue en absoluto, llegando la lluvia a lograr el sustento con las secuelas que observaremos ahora.
Lamentablemente, como sucede en otros varios casos en la creación es un elemento del que se ha descuidado su ejecución en los tiempos recientes, lo que ha causado que hoy en día nos encontremos en muchas oportunidades con desperfectos en los Revestimientos Monocapa que no deberían de haber ocurrido si se hubieran tenido presente una sucesión de sencillas medidas a lo largo de la ejecución del mismo.
Desperfecto en Revestimiento Monocapa
Se ve un tema visible que para que el revestimiento se ejecute en condiciones correctas, el sustento debe cumplir una secuencia de condiciones que lo permitan. Son condiciones realmente fáciles de tomar en cuenta a lo largo de la ejecución y muy baratas, solo hay que conocerlas, algo que debería ser norma general entre los aplicadores de monocapa, pero que después algunos son decepcionante en relación a la profesionalidad de sus actuaciones.
Lo primero que hay que tomar en cuenta es que el sustento no se encuentre hidrofugado, ni se intente soportes de yeso, pinturas u otros revestimientos plásticos, dado que requerimos cierto anclaje mecánico entre el revestimiento y el sustento para que hagan un trabajo solidario entre ellos.
Por supuesto, nuestro sustento debe estar de manera correcta ejecutado, dado que si las condiciones de ejecución del mismo van a ocasionar movimientos, fisuraciones o desplazamientos, estos van a tener repercusión en la cubierta de revestimiento y entonces van a perjudicar al monocapa que coloquemos. Además de ser de manera correcta ejecutado, el sustento debe existir tenido tiempo para desarrollar las deformaciones propias del mismo a lo largo de los primeros periodos de colocación.
De esta forma ya que, es sustancial que sea un Sustento Estabilizado, oséa, que haya creado las retracciones que acostumbran producirse en algunos materiales a lo largo del secado, por lo cual es deseable omitir un tiempo para que el sustento se estabilice, entre uno y dos meses como mínimo sería lo deseable.