Es normal que los muebles de forja siempre se encuentren en el jardín y que la exposición al sol y a veces también a la lluvia los deje un poco descuidados. Sin embargo, no tienes por qué deshacerte de ellos. La forja es un material que puede durar toda la vida si le das los cuidados que merecen y lo pintas de vez en cuando. Estos aspectos son importantes para que tus muebles de forja luzcan como nuevos, sin importar cuántos años tengan en uso. Con tan solo algunos pasos puedes pintar tus muebles, ya sean cabeceros de forja, rejas, mesas o cualquier cosa que tengas con esa material fácilmente.
Limpiar para ver los desperfectos
Para comenzar, los muebles se deben lavar con agua templada y jabón para vajillas, ya que este tiene desengrasante, lo que facilita la limpieza de ese material sin desgastarlo. Si el diseño es bastante complicado, es probable que necesites de cepillos de varios tamaños para llegar a las zonas de difícil acceso y retirar la suciedad por completo. La idea es que quede bien limpio y con los daños expuestos.
Inspeccionar los daños
Luego de la limpieza y de que estén totalmente secos, entonces es hora de evaluar los daños. Si la zona donde se ha desprendido la pintura es bastante pequeña, entonces no necesitas de mucho trabajo. Quizás puedas solucionarlo con unos toques de pintura de un color lo más parecido posible al original, intentando «fundir» los bordes para que no se note la diferencia.
Si está muy dañada, volver a pintar
Si la pintura está demasiado dañada, entonces hay que quitar la pintura antigua y luego volver a pintar el mueble por completo. Retirar la pintura puede hacerse con el uso de un producto químico. Luego, si hay zonas oxidadas, se tratan con un transformador de óxido. Una vez hecho esto, es momento de pintar con una pintura o esmalte apta para exterior. Esta puede ser una buena oportunidad para cambiar el estilo de los muebles y transformarlos con un nuevo color.
Productos especiales para pintar hierro, forja y metal
Lo mejor es que uses las pinturas que sean directas al metal, pues con ellas no necesitas ni aplicar transformador de óxido ni tampoco ningún tipo de sellador. Si el mueble que vas a restaurar es de alguna aleación de metal, entonces lo conveniente es lijar y aplicar sellador, así se mantendrá mejor la pintura.
Toma en cuenta estos consejos y dale un toque de vida a esos objetos de forja que tienes en tu hogar.